Las denuncias salieron a la luz a partir de un artículo dentro del libro llamado: “Sexual Misconduct in Academia: Informing an Ethics of Care in the University” (mala conducta sexual en la academia: sobre una ética del cuidado en la universidad Routledge, 2023) donde fueron expuestos varios casos dentro de ellos el sociólogo. El ámbito de estos casos de abuso fue el Centro de Estudios Sociales, dirigido por el profesor hasta 2019. Todas las denunciantes tuvieron que interactuar con el profesor y referente del pensamiento contemporáneo por su labor sobre movimientos sociales, en diferentes momentos de su formación académica. A lo que la denuncia pública sobre abuso de poder y abuso sexual por parte del acedémico, de la activista Mapuche defensora de los derechos humanos y de la naturaleza, sumó su testimonio en solidaridad con dichas mujeres, en búsqueda de justicia.
“Fuera Boaventura. Todas sabemos” expresaron en las paredes del edificio universitario. Las pintadas fueron borradas, pero el silencio se quebró de una vez por todas”.
“La renuncia de Boaventura de Sousa a continuar al frente del centro que había fundado en Coimbra en 1978 coincidió con la aparición de pintadas en el edificio académico que aludían a los casos de acoso: Fuera Boaventura. Todas sabemos. Y este hecho sirve para arrancar el artículo que ha desatado la tormenta en Portugal, titulado The walls spoke when no one else would (las paredes hablaron cuando no lo hacía nadie más) y redactado por las antiguas investigadoras del Centro de Estudios Sociales Lieselotte Viaene, Catarina Laranjeiro y Miye Nadya, que no concretan los nombres de los profesores implicados en situaciones de acoso, pero que dan pistas suficientes para saber que se refieren a la institución portuguesa y al que fue su ilustre director.” cita Tereixa Constenla en del Diario español El País, el 15 de abril de 2023.
Las repercusiones se hicieron sentir rápidamente, ya que días después el profesor fue suspendido y separado de sus cargos, y se está generando una comisión investigadora para evaluar su caso. Moira Millán dio muy pocas notas sobre el tema, a continuación nos explica porqué, su denuncia pública tuvo gran repercusión, pero el tratamiento de su testimonio en muchos casos no fue respetuoso y faltó la perspectiva de género que se requiere a la hora de comunicar sobre acoso sexual. Moira brindó un relato completo, apuntando al racismo y a las prácticas extractivistas que sostiene la academia que permitieron a este señor gozar de impunidad y creerse intocable por tantos años en complicidad con los estamentos académicos más altos. Es por este motivo que desde el Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el buen vivir co-fundado por Moira Millán, y la Agencia de Noticias Indígenas Telúrica pautaron este espacio de escucha respetuoso y de contención para analizar el tema.
LA ACADEMIA, ABUSOS Y SUS PRÁCTICAS COLONIALES, LA ENTREVISTA:
Abrió la conversa la comunicadora Mapuche Irma Caupan quien también en co-fundadora del MMDIPBV y quién conduce el programa radial del Movimiento “Voces de los Territorios” todos los martes de 21 a 22hs por Radio Caput.
_“Ante todo queremos escuchar tu descargo sobre todo lo que está aconteciendo”_ comenzó Irma Caupan.
_“Mari mari kom pu lamgen, kom pu zomo, kom pu che. Rume mañum, Küme trawleiñ, zunguleiñ. Tufachi tañi zungun, Mupin zungunlean.”_ Moira MIllán saludó en mapudungun idioma milenario. Dijo: “Saludos a las hermanas, saludos a las mujeres, a toda la gente. Muchas gracias. Que sea un buen encuentro para hablar. Lo que voy a contar es mi verdad”_ Y continuó:
_”Me detuve a pensar que esta palabra “mupin” en mapudungun es algo que es, lo será por siempre y de manera definitiva, es la verdad. En los medios de comunicación se instalan temas o noticias como verdades que después se tienden a desmentir, y pensaba que como mujer mapuche no quería prestarme a esos circos que, lamentablemente, son parte de la misoginia, del morbo de estar contando una y mil veces algo que afectó mi vida, mi pullu (mi espíritu) y quería un espacio amoroso, un espacio de respeto para poder hablar del tema y darle los múltiples abordajes que tiene este asunto para que no quede como una noticia más. Para no ser parte del show del entretenimiento, sino que realmente nos lleve a reflexionar el tejido que se está construyendo que puede ser: un tejido solidario sororo o también un tejido como una red, que te atrapa para ser una presa de cacería mediática. ¿De qué estamos hablando? ¿Cómo y desde qué lugar nos enunciamos y tomamos la palabra, la responsabilidad? Entonces, estoy agradecida a Voces de los Territorios a mi lamngen (hermana) Irma, agradecida también con la agencia Telúrica a mi lamngen (hermano) Sebas por poner la escucha y poder hablar sobre este asunto, y quiero agradecer también a todas las personas que se van conectando y que quieren escuchar mi versión de este tema, mi verdad en definitiva.”_ expuso Moira.
_”El verdadero relato de lo que sucedió y que nos permite también visibilizar no solamente el acoso sexual, sino el abuso de poder, el extractivismo intelectual, el plagio y también el clasismo. Todo lo que ha surgido a raíz de la denuncia de estas 3 mujeres europeas, se le dio difusión a algo que vos ya habías denunciado.”_ agregó Irma Caupán.
-Lo primero que quiero comentar es que cuando esto aconteció en el 2010, busqué apoyo, busqué ayuda y no la encontré y que hoy tampoco esa ayuda vino hacia mí. Porque si bien hubieron diferentes espacios que se solidarizaron ninguno de esos espacios me dijo qué herramientas me ofrecen para que yo pueda efectivizar una denuncia penal, ¿qué herramientas ofrecen para acompañarme? ¿Qué dispositivos de ahora en más, van a activar para que haya contención? Yo quiero hacer una relatoría más allá del hecho puntual y lo voy a contar por última vez porque estoy muy cansada de hablar de lo que pasó. Me interesa hablar de cómo se va configurando un espacio de impunidad. Cuando sucedió el hecho en el 2010, yo viajé a Portugal invitada por un colectivo de académicos argentinos de allá, ellos me cuidaron, me trataron de manera muy amable e ignoraban absolutamente que este hombre iba a tener esta conducta en Coimbra, pero ¿qué pasa ahí? tanto la universidad Lusófona como la Universidad de Coimbra no tuvieron ningún tipo de cuidado hacia mi, ni ningún tipo de responsabilidad hacia mi persona, no la tienen no sólo conmigo, sino que no la tienen con ninguno de los invitados, invitadas, invitades de los movimientos sociales y fundamentalmente de los pueblos indígenas. Esto es cosificarnos, es objetivizarnos para ser suministro de estudio, de investigación académica sin plantear la reciprocidad, es parte de la configuración criminal. Quedamos a merced en las manos de personas que pueden ser muy bien intencionadas que nos respeten y nos traten de manera responsable o quedamos a merced de personas criminales abusadoras como fue el caso de este sujeto Boaventura de Sousa Santos. Entonces creo que ahí hay un tema que es fundamental y del que se debe reflexionar y es la reciprocidad con los pueblos indígenas. El otro punto que quiero señalar también es el tratamiento de la noticia, porque yo busqué ayuda en el 2010, y después de eso en los ámbitos académicos que me convocaban yo empecé a poner mis propias normas. Quiero explicar a la audiencia que cuando se invita a una integrante de algún pueblo indígena no voy a hablar sólo como mapuche, voy a hablar como una mujer racializada por esta cultura dominante patriarcal y supremacista, jamás se le plantea una relación responsable institucionalmente. Si esta persona no es académica no se le plantea remuneración, no se le plantea un seguro, no se le plantea un esquema de seguridad y resguardo. Simplemente esta persona es convocada y como es indígena tiene que ir gratis y tiene que ir sin ningún tipo de cobertura, esto es parte del extractivismo es parte del coloniaje. Quiero que nos detengamos a pensar en esto porque ahora hay muchos machos de la academia que salen a poner el grito en el cielo preocupados por lo que le llaman cultura de cancelación a todo el recorrido intelectual de Boaventura Sousa y a su producción, entonces mi gran pregunta, y la voy a formular como pregunta si bien yo tengo mi posicionamiento, pero ¿es válido cuando todo el proceso de investigación a sido ejecutado sobre la base de la opresión del extractivismo y el desprecio a quienes suministraban esa información? ¿Es válido ese trabajo descolonial, ese trabajo de cuestionar, e interpelar el poder y la colonialidad sobre esta subalternidad llevando hacia adelante prácticas opresivas prácticas coloniales? yo creo que eso también nos tenemos que cuestionar. Cuando volví de Portugal yo hablé con varias personas de lo sucedido, personas que incluso en estos días me han mandado mensajes de solidaridad y apoyo, pero que en su momento no hicieron nada. Yo no sé porque no hicieron nada, ¿no tenían herramientas? ¿Qué pasa con esta academia que justamente es la generadora de teorías? Teorías que buscan dar herramientas a los pueblos para emanciparse, ese lugar de privilegio que ha tenido siempre la academia para entronizar sus conocimientos como los únicos válidos y resulta que esta casa, este espacio de producción de saberes y que va generando teorías y que es parte de la ingeniería social política y cultural del mundo, no da herramientas, no dan ningún tipo de herramientas a esta situaciones de opresión y abuso.”_ cuestionó Moira.
_”Eso es lo perverso de todo esto”agregó Irma.
_”Totalmente, y así es que como recibí y agradezco todos los mensajes de solidaridad, también hubieron mensajes de hostilidad, mensajes agresivos. Por ejemplo una mujer, defendiendo a Boaventura me dijo que soy una oportunista, que por qué salgo ahora, y le respondí a esta mujer, yo venía saliendo hace un año atrás. El video que se está viralizando es de un año atrás, no era el problema mi voz, mi testimonio, mi voz estuvo siempre intentando ser audible frente a esta injusticia y buscando justicia, el problema eran los tapones coloniales. Siempre digo que esa frase desafortunada de “dar voz a los que no tienen voz” en realidad lo que hace es justificar esa colonialidad. Todas tenemos voz, todes tenemos voces, el problema es la colonialidad que nos pone tapones y decide que voces pueden ser audibles y cuáles no. No es mi problema que no me escucharan, el problema se suscita en la complicidad de la academia con este tipo de prácticas. Imagínense ustedes, que estas mujeres víctimas de este sujeto perverso, tuvieron que hablar fuera de Portugal, hablar en inglés y lograr ser apañadas en un espacio de prestigio dentro de la academia para denunciar lo que les venía pasando, estas mujeres académicas muchas de ellas blancas, tuvieron que generar todas estas herramientas para poder activar un mecanismo de denuncia, imagínense a mi, una mujer mapuche activista que nos soy académica, que soy una mujer indígena y que por supuesto no cuento con estas herramientas para poder dar visibilidad a lo que me había pasado. Entonces, de ninguna manera se puede interpretar que mi aparición en los medios y mi denuncia pública es parte del oportunismo, es parte del dolor, porque también me interpelo a mi misma, este silencio de tanto tiempo fue habilitando que un montón de chicas fueran víctimas y eso me dolió y en solidaridad no me calle, yo sí les creo a ellas, si fui víctima de este sujeto. Es por ello que me pareció muy necesario respaldar los dichos de estas compañeras dando mi testimonio personal que es verdadero y que hasta aquí, no había querido ser escuchado “_ explicó Moira.
_”Testimonio que es verdadero y que también nos permite visibilizar todo lo que venimos denunciando: el racismo, ¿qué pasa con los cuerpos racializados? y la verdad es que es terrible este hombre negando los hechos, considerando que es una venganza personal e institucional, cuando hasta en las paredes estaban denunciando: “todas lo sabemos” es decir, nos permite darle claridad a estas realidades que se padecen y que se silencian”_ reflexiona Irma.
_”Además no es sólo llegar al extremo de una situación de violencia que tiene múltiples abordajes, cuando yo relato lo que me pasó con Boaventura, no es solamente un abuso sexual, es el abuso epistémico, es el abuso espiritual de mi persona, del abuso frente a la situación de vulnerabilidad en la que me encontraba. Yo fui a Coimbra con el compromiso que él cubriera todos mis gastos, cuando digo que fui secuestrada, es porque yo no me podía ir si él no me daba mi pasaje, yo no tenía ningún tipo de contacto con ningún miembro del equipo, él me aisló. Por eso quiero que se entienda que este hecho no es un hecho casual, es un hecho mentado, es un hecho que él venía seguramente esperando desde hace muchísimo tiempo. Estoy decidida a hacer la denuncia penal contra él. Cuando llegamos al restaurante (donde la había invitado a cenar) yo no tengo testigos, estábamos solos, en ese momento me llamó la atención pero jamás me imaginé que yo iba ser parte de algo que él venía pergeñando para que termine en una situación de abuso. Cuando luego voy a su casa, no tengo testigos, porque me lleva al edificio donde vive en un momento en que ni siquiera había portero, o sea él entraba con su sistema de seguridad al departamento. Los únicos testigos que tengo son los estudiantes que asistieron a mi seminario y realmente necesito que ellos den su testimonio que confirmen que yo estuve en ese lugar llevando adelante esta conferencia, no hubo nadie de la Universidad Coimbra mediando en esta relación. Entonces si tengo que denunciar penalmente no solamente denunciaría a este señor, sino también a la Universidad, porque la Universidad es responsable, es como si la universidad hubiera entendido que este hombre traía a una amiga a una actividad privada de él, o no se metía, como si estuviera contratando a una sirvientita en su casa particular. Yo fuí para dar un seminario para estudiantes de posgrado, la Universidad tendría que haberse involucrado. No tengo ni siquiera una certificación de que estuve dando el seminario, entonces si yo tengo que demostrar que estuve ahí en el 2010, dependo de la buena voluntad de todos los estudiantes que estuvieron valiéndose, siendo beneficiarios, de mi sacrificio cuando estuve allí compartiendo mi experiencia.
Creo que eso tiene que cambiar en la Universidad, porque no es solamente la violencia sexual que he sufrido, sino también las múltiples violencias,y es cuando hablamos de extractivismo, porque la academia entra a nuestros territorios. Por supuesto existe otra academia, que se está interpelando, que está sacando documentos, que se está cuestionando poniéndose muy firme, para desandar estas conductas y que quiere construir una forma de respeto y reciprocidad. Con esa academia sí estamos caminando pero son trabajadores y trabajadoras , no son quienes tienen el poder dentro de la Academia.
No creo que se trate solo de la Universidad de Coimbra, creo que se trata de las universidades del mundo, se trata de este sistema educativo, se trata del poder. Por ejemplo, situaciones que parecen sutiles pero que son desgarradoras, algo que ha sucedido con un escrito que estuvo circulando por parte de una académica llamada Mariela Puga, de manera muy acertada cuestiona la preocupación que tienen ciertos segmentos patriarcales de la academia por la cultura de la cancelación y no por la cultura del poder, sin embargo Mariela omite que soy Mapuche, y cuando ella omite y me pone con la identidad argentina, está negando algo terrible, está negando que las mujeres indígenas estamos llegando sin ser académicas a la academia, con nuestras propias epistemologías teorizadas, con nuestras propias prácticas teorizadas. Está negando que no solamente hubo una carga patriarcal misógina en el accionar de este sujeto, sino que además niega la carga colonial que queda en evidencia por su racismo. Que haya una omisión de mi identidad como Mapuche es otra forma de volver a revictimizarme. Vuelvo a quedar omitida, es como si yo no existiera. ¿A qué argentina le pasó esto? le sucedió a una mujer Mapuche y tenemos que decir las cosas por su nombre. Estamos en una Argentina racista, en una Argentina eurocéntrica, donde la academia fue durante mucho tiempo la justificadora de los genocidios, esta academia tiene que revisarse y sé que hay sectores que lo están haciendo.”_ afirmó Moira.
_”Moira, vos crees que la academia puede realizar un aporte verdadero en la descolonización?”_le preguntó Sebastián de la Agencia de Noticias Indígena Telúrica.
_”Yo creo que sí, que la academia está en un momento histórico de quiebre de sus estructuras sedimentadas en la colonialidad, están en un momento donde la sociedad necesita que la academia esté a la altura de las circunstancias históricas, y creo que es posible, pese a que yo siempre fui muy crítica de la academia y lo sigo siendo. Ustedes saben que soy impulsora de la Pluriversidad que queremos hacer aquí, que siempre busco entramarme con compañeras como Xochitl Leiva, como tantas otras que están buscando generar otro modelo educativo alternativo. Creo que hay que tirar abajo todas las estructuras que conllevan a sostener un poder colonial y repensarnos en igualdad. Cuando se habla de democratizar todas las estructuras, deberíamos de empezar por democratizar los diálogos de saberes, que no están democratizados. Eso es lo que tenemos que desandar y lamentablemente falta bastante. En estos días muches me dicen “no estás sola” pero la verdad es que nadie ha aparecido diciéndome por ejemplo qué mecanismo, qué herramientas me van a dar desde las distintas organizaciones para que yo pueda tener acceso a la justicia, porque estos hechos sucedieron en Coimbra y yo estoy en la Patagonia, y no puedo viajar a Portugal con mis propios recursos para formalizar una denuncia penal. Ni hablar de las autoridades argentinas, no recibí ningún mensaje de la actual ministra del ministerio de las mujeres y géneros, ni de organismos de Derechos Humanos, creo que el Estado debería de poner sus estructuras para ayudarme a tener acceso a la justicia.
Agrego algo más, mientras estamos viviendo esta situación, como vivo en el campo no puedo dimensionar la repercusión mediática que está teniendo en Argentina, pero sé que a nivel mundial ha tenido bastante alcance, estamos hablando de un señor que ha sido amigo del poder, un señor que ha sido el gurú de la izquierda, que ha tenido una amistad con Evo Morales, con Chavez, con Cristina Kirchner, con Lula quiero decir, que ha estado en el apogeo del progresismo, me gustaría decir que este señor y tantos otros progresistas nada han dicho por ejemplo respecto al encarcelamiento, a la persecución, a la represión judicial que está sufriendo el pueblo Mapuche y en particular a la situación injusta, totalmente injusta, aberrante, racista, estamos viviendo una dictadura racista, que están padeciendo las cuatro lamngen (hermanas) presas: la Machi Betiana Colhuan, la lamgen Luciana Jaramillo, Celeste Guenumil y la lamgen Romina Rosas junto a sus hijes, creo que esto tiene que ver con las prácticas de desconsideración, de desaprensión, de indolencia, con la que lamentablemente se manejan quienes en definitiva terminan poniendo en agenda los temas que consideran importantes.”_ remarcó Moira.
_”Una de las preguntas que nos dejaron las compañeras de Agencia Presentes, es cómo analizas el tratamiento mediático de su caso en particular y de abuso sexual en general?_ preguntó Irma.
_”Creo que el tratamiento en su mayoría fue horrible, estaba mirando el titular que utilizó El Salto, yo no hubiera elegido jamás un titular como ese, estuve analizando algunos de los artículos publicados y hacen hincapié una y otra vez en los modos en que se dió la situación de una manera morbosa, y eso no ayuda. Hubo un tratamiento sumamente incorrecto, y se sacaron de contexto frases que dije, por eso soy tan renuente de dar entrevistas. Elegí un sólo canal de televisión, de la veintena que me llamaron, elegí uno solo que me prometió que iba a respetar todo y realmente lo hizo, le di entrevistas a dos diarios y a una radio, y no quise hablar con ningún medio más. En Argentina con ninguno, porque temía justamente de que hubiera un abordaje desubicado, de maltrato, de no cuidado. Como mujer Mapuche y como activista y como víctima de esta situación pienso que se tiene que ir desde lo más profundo, desde lo más estructural ejemplificado con algo coyuntural, con algo bien puntual que está sucediendo, pero la lectura tiene que ser estructural y de mucho cuidado hacia la víctima, lamentablemente no se dió. Por eso también decidí no hablar, porque por ejemplo uno de los diarios que me entrevistó de Portugal, la mujer pretendía que yo buscara testigos, amigos y amigas, familiares a quien yo le haya contado el hecho cuando regresé de Coimbra, pretendía que yo le mostrara los mails de intercambio con Boaventura de hace trece años atrás, y planteaba que hiciera una exposición de otras víctimas con las que yo hubiera tenido contacto. Todo eso me parece de una agresividad tremenda, me parece innecesario. Es una agresividad injustificada, que la justicia pida todo eso es entendible, pero que una periodista lo pida, de ninguna manera. Y por supuesto que no voy a andar exponiendo a mi familia en esto, ni necesito que salga nadie a reforzar mi testimonio. Por eso comencé diciendo “Tufachi tañi zungun, Mupin zungunlean” (ésta es mi verdad), si el winkanaje no me cree tema de ellos, yo sé que esa es mi verdad”_ concluyó Moira.
_”Lo que te exigía la periodista es más perverso de todo lo que has vivido y todo lo que estás padeciendo, en vez de ayudar o de colaborar para que realmente la verdad pueda salir a la luz.”_ comentó Irma.
_”Una Lagmien pregunta ¿Qué opina sobre los hechos de abuso sexual dentro de los territorios mapuches?_ preguntó Sebastián.
_”Mi opinión es para todos igual, no es que un abuso sexual cometido por alguien de izquierda o por alguien de derecha sea menos doloroso o un abuso sexual cometido por alguien de mi propio pueblo sea menos doloroso, los abusos son dolorosos y ni hablar los abusos sexuales, es decir, condeno todo eso. Algo bien categórico que sucedió, porque yo creo que nos preceden más los hechos que las palabras, es que soy una de las impusoras de dar visibilidad al chineo que es ésta práctica aberrante, la violación contra niñas indígenas. Cuando he ido en algún momento a Gulu Mapu (Chile) me encontré con todo lo que las fuerzas de seguridad represivas del estado Chileno han cometido sobre las cuerpas de nuestras lamgen, y no sólo denuncian a carabineros si no también a wentru mapuches y me he ofrecido a acompañar esos procesos de luchas. Merecemos respeto, ser cuidadas, ser amadas, ser protegidas y ser honradas, nuestras cuerpas son sagradas. Entonces no importa si es el cacique de los caciques, si es el longko de los longko, si es el gurú de la izquierda o el académico más famoso del mundo, no interesa quien cometa el abuso, es un criminal lo que hace es criminal. Vamos a unirnos para que esto termine porque saben que nuestro caminar es el buen vivir cómo derecho que implica restablecer la armonía, el respeto, la amorosidad, la reciprocidad entre las personas, los pueblos y entre los seres. Si tuviéramos todas, todos y todes muy claro qué mundo queremos construir, cómo nos queremos relacionar, si ese horizonte fuera tan claro como es el que nos legaron nuestros kuifiquecheyen (nuestros ancestros) sería tan fácil poder tejer lazos de solidaridad y poder plantear mecanismo de resguardo. Pero lamentablemente creo que hay perspectivas de mundos, de qué entendemos por justicia y de qué entendemos como saberes y cómo relacionarnos. A veces resulta agotador, porque estos días tuve que soportar un nivel de agresión en las redes y no podía créer que había mujeres defendiendo a este sujeto y no lo puedo entender.”_ expresó Moira.
_”¿Recibiste amenazas o intimidaciones a partir de lo que contaste?”_ preguntó Irma.
_”¡Si un montón! Miren cuál es mi situación: hay un sector de la izquierda de Portugal que me ha maltratado, me ha amenazado, pero he tenido también voces de la izquierda de Portugal que me han pedido disculpas sintiéndose avergonzados por la conducta de este sujeto y prestando solidaridad. Entonces qué es lo que estoy viendo, el otro día bromeando un poco con la palabra que se utiliza mucho en Argentina «la grieta», la verdadera grieta que se ve acá es entre la subordinación y el poder, entre la opresión y la liberación y el patriarcado y el derecho de todas y todes nosotres. Lamentablemente hay sectores que parecen muy revolucionarios pero están contaminados por el poder patriarcal. No voy a ir a Portugal en soledad, yo se lo había planteado a las compañeras, no me parece correcto y tienen que apañarme. Hacer una denuncia a este tipo bajo amenazas, yo quiero estar acompañada y sentir que realmente mí dolor y mí reclamo es tan audible cómo lo es para las académicas blancas, merezco también ser acompañada, ser respetada”._ compartió Moira.
_¿Cómo podríamos vincularnos a los Pueblos Originarios y juntar nuestros conocimientos aprendidos y mestizos con el conocimiento originario?_ preguntó Sebastian.
_ “Creo que lo primero que hay que hacer es resguardar a quienes tienen ese conocimiento, a veces se busca tratar de comprender la amplía y múltiple dimensión que tienen los saberes del pueblo indígena y cuando los portadores de esos saberes, los defensores de los territorios, los guardianes de la tierra están encarcelados, perseguidos o son asesinados, esas mismas personas que tienen la curiosidad de tomar de nosotros lo que les sirve no tienen el compromiso que hace falta.”_ comentó Moira antes de quedarse sin conectividad desde un pueblo precordillerano de Puelmapu (Patagonia) en la provincia de Chubut. Los fuertes vientos del otoño patagónico cortaron la comunicación. Esta es la realidad de las personas que viven en los territorios plurinacionales donde el Estado no se compromete a garantizar el derecho a la conectividad.
_”Nosotras desde el Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el buen Vivir lo que estamos haciendo es justamente apoyar y denunciar a la Academia y al sociólogo portugués Bonaventura de Sousa Santos cómo lo viene haciendo nuestra lamngen Moira Millán y queríamos que justamente pudieran escuchar de ella directamente el verdadero relato.”_concluyó Irma Caupán para cerrar esta conversa profunda y reflexiva sobre los mecanismos racistas que operan sobre nuestras cuerpas territorios.
Para comunicarse con Moira Millán pidió colectivizar su correo electrónico moiritamillan@gmail.com
Campaña: Contra la violencia sexual y de género en los entornos académicos ibero-americanos.
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